Bantec mejora la convivialidad haciendo deporte en la oficina

Bantec ha implementado una novedosa política de yoga y gimnasia en la oficina. El objetivo es incrementar la satisfacción de sus empleados bajo la idea de hacer del lugar de trabajo un espacio en el que se vive y se trabaja mejor, en la búsqueda de la convivialidad.

Cuando trabajamos ocho horas sentados delante de un ordenador acumulamos malos hábitos que desencadenan dolores articulares, cansancio, estrés y ansiedad. Distintos medios de comunicación se hacían eco recientemente de cómo compañías suecas, en concreto la empresa pública de distribución de agua Kalmar Vatten o la marca de ropa del extenista Björn Borg, llevan años desarrollando políticas de deporte en el trabajo obligatorias para sus empleados.

La peculiaridad de la experiencia piloto puesta en práctica por Bantec, reside en que las actividades programadas se ofrecen de manera voluntaria para su plantilla, en horario laboral en su centro de trabajo ubicado en el Parque Empresarial Zuatzu. La iniciativa está teniendo una excepcional acogida, de tal forma que ya se han sumado el 90% de sus 37 empleados.

La consultora experta en la definición, gestión y búsqueda de financiación para proyectos de inversión empresariales, especialmente de I+D+i, lleva a cabo dos actividades: Yoga, martes y jueves al mediodía, bajo la batuta de Ana Basa, directora y profesora del Centro Awen de Equilibrio Humano en Donostia-San Sebastián, y circuito de gimnasia personalizado de intensidad media-alta en dos grupos, una vez por semana, jueves o viernes, a cargo de Iñigo Almandoz del gimnasio Ahalman.

A través de estas técnicas aprendemos a respirar, a concentrarnos y a gestionar estados alterados relacionados con el estrés. La meta es ayudar a los empleados a equilibrar y armonizar su aspecto físico, emocional y mental. El yoga, por ejemplo, desbloquea y relaja, pudiendo ayudar a un mejor y más eficaz trabajo individual y en equipo.

En 2014, un estudio de la Universidad de Estocolmo demostró que practicar una actividad física durante la jornada laboral tiene ventajas para el empleado y el empleador. Al estar más en forma el empleado alcanza un mayor estado de concentración. Por su parte, el empleador consigue una reducción del 22% del absentismo laboral, un dato destacable en un país donde las bajas por enfermedad son dos veces superiores a la media europea.