Bantec Group ha puesto en marcha la segunda fase de su programa de inserción laboral, “Becas Bantec”. Como ya hiciera en la primera mitad del presente ejercicio, la consultora líder en la gestión de la I+D, incorporará a otros cuatro jóvenes ingenieros recién licenciados, para sus oficinas de Donosti-San Sebastián y Pamplona, con el objetivo de formarles en la gestión de la innovación y la internacionalización y de ofrecerles sus primeras oportunidades en el ámbito laboral.
El programa pretende propiciar la retención del talento en la región, por contraposición al fenómeno de deslocalización que se viene produciendo, derivado de la actual fase de crisis económica. Para su incorporación al programa, los recién titulados, a quienes se ayudará a forjar su carrera profesional, deberán demostrar su vocación innovadora.
Las “Becas Bantec” pretenden potenciar el emprendizaje y despertar el instinto innovador, ya que los ingenieros becarios colaborarán en los proyectos tecnológicamente más novedosos en cuya gestión esté inmersa la consultora.
El programa está dotado de un carácter de largo plazo. El compromiso adquirido es el de su repetición al menos durante los próximos cinco años. La consultora pretende desarrollar e impulsar su política de Responsabilidad Social Corporativa (RSC) y ayudar a paliar el drama del desempleo juvenil, que en más de un 50% padecen los jóvenes de hasta 25 años.
A través de las “Becas Bantec”, esta empresa persigue también participar en la construcción de una sociedad más justa y más abierta a la concesión de oportunidades a los más jóvenes. Si cada empresa domiciliada en España (se calcula que existen algo más de tres millones) contratara un trabajador, habríamos resuelto el problema del paro.
Bantec entiende la Responsabilidad Social Corporativa (RSC) como la forma de conducir sus negocios teniendo en cuenta los impactos que todos los aspectos de sus actividades generan sobre sus clientes, empleados, accionistas, comunidades locales, medioambiente y la sociedad en general. Ello implica el cumplimiento obligatorio de la legislación nacional e internacional en el ámbito social, laboral, medioambiental y de Derechos Humanos, así como cualquier otra acción voluntaria que la empresa quiera emprender para mejorar la calidad de vida de sus empleados, las comunidades en las que opera y de la sociedad en su conjunto.