La alianza de empresas navarras con la Fundación Vicente Ferrer logra poner en marcha un centro materno infantil en la aldea de Pulakunta (India)

grupo navarra india

 

La alianza de empresas navarras y la Fundación Vicente Ferrer, que nació en 2019 con el objetivo de mover conjuntamente una iniciativa con propósito social de acompañamiento a las comunidades más vulnerables del sur de la India-, ha logrado poner en marcha el segundo proyecto de cooperación internacional al desarrollo.

La incorporación de sus trabajadores y familiares, así como la adhesión de nuevas empresas, ha hecho posible superar en tan solo tres meses, la recaudación de los fondos necesarios para la construcción de un centro materno infantil que atenderá a mujeres embarazadas, adolescentes y niños y niñas en su etapa preescolar.

El centro, cuya construcción comenzará en breve, se sitúa en la aldea de Pulakunta, en el estado de Andra Pradesh, en el sureste del país y entrará en funcionamiento en 2023. La Fundación Vicente Ferrer se encarga, en coordinación con el Gobierno indio y con la comunidad de la aldea, de la construcción de este Anganwadi (refugio en el patio) como se denomina en telugu, la lengua local.

Entre los servicios que prestará, se incluyen los de nutrición suplementaria, exámenes médicos, educación preescolar no formal, talleres y educación nutricional y de salud, inmunización, revisiones médicas y servicios de derivación.

Las empresas que se han sumado a esta iniciativa son Tetrace, IED, Indversis, Nabrawind, Sertecq, Bantec y Serniatela.

Su apoyo a las comunidades vulnerables de Anantapur en la India surgió porque algunas de ellas, como Tetrace, IED, Indversis o Nabrawind, tienen implantación o interés en la India y quisieron poner su grano de arena en la contribución a un mundo más justo. Más adelante, se han ido sumando Sertecq, Bantec y Serniatela que, desde diferentes sectores, enriquecen el grupo y comparten una acción de responsabilidad social y desarrollo sostenible.

De esta manera, la alianza ha logrado poner en marcha el segundo proyecto de cooperación internacional, después de que en 2020 el grupo inicial lograra que nueve familias de la aldea de Aravakur tuvieran acceso a una vivienda digna y segura, lo que supone un cambio muy significativo en sus vidas.

Ambos proyectos se centran en el trabajo a favor de las mujeres que necesitan un mayor apoyo en un país tan patriarcal como la India y donde la discriminación afecta a las mujeres desde antes de nacer.

La Fundación Vicente Ferrer trabaja de forma muy enfocada y transversal en este sentido, con actuaciones como que las viviendas se registran siempre a nombre de la mujer, creando grupos denominados Sanghams en los que se ayudan entre ellas compartiendo y resolviendo sus problemas, acompañándoles en la creación de pequeños negocios que cambien su rol en la familia, en las comunidades y a más largo plazo en la sociedad o cuidando que en situaciones de especial vulnerabilidad como el maltrato o el abandono estén protegidas.

Las empresas comprometidas logran así su vinculación con varios de los Objetivos de Desarrollo Sostenible como son el fin de la pobreza, la salud y el bienestar, la igualdad de género, la educación de calidad y con el objetivo 17 en el que Naciones Unidas subraya la importancia de formar alianzas para lograr avanzar en la agenda 2030.

La ilusión del grupo es poder viajar a la India y visitar a las comunidades que tienen una vida más digna gracias a su apoyo. Desde la Fundación Vicente Ferrer, se anima a que otras empresas participen en el próximo proyecto porque “la actuación es local pero el mensaje es global. Mostramos lo mucho que se puede lograr si se suman esfuerzos y sobre todo, si existe un compromiso y una implicación en conseguir un mundo más justo que englobe a todos los países y que permita a las comunidades más vulnerables ser ellas el motor de su propio desarrollo” señala Marián García, delegada de la Fundación Vicente Ferrer en Navarra.